Estoy desesperado en esta encrucijada,
quisiera tener una vida encantada,
para no ser testigo de este sufrimiento que me embarga
y llorar sin consuelo, esta preocupación que me mata.
Soy conciente del castigo que merezco,
quisiera huir…y si en mi intento perezco;
daría tributo al cielo por hacerme ese bien,
daría tributo al cielo por llevarme también.
A mi alrededor todos ríen, todos cantan,
todos sueñan, todos hablan…
mientras yo, sumergido en mis problemas,
ya no encuentro mas dilemas
que el de morir hoy día
y así poder acabar con esta agonía.
¡Dios mío! ¿Acaso hay un mayor sufrimiento
a la que ahora estoy viviendo?
No me respondes…lo sabía.
Ahora estoy solo y lamentando
aquella oportunidad que solo pude verla.
Ahora mi vida no vale nada…y mi alma,
en el vagar del tiempo se irá a perder,
ya que yo a esta vida:
¡Nunca la llegue a querer!
AUTOR: Jorge Quiroz Chava
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